Sistema anticorrupción: trascendencia y cambios en México

septiembre 22 2020 | Pensamiento humanista

Esta iniciativa, que surgió en la reforma constitucional del 27 de mayo de 2015, representa un compromiso para la ciudadanía y el Gobierno de la República con miras a prevenir y combatir la corrupción en defensa de la transparencia, el acceso a la información pública y la rendición de cuentas.

¿De qué va?

El Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), trata de un compendio de reformas y leyes que se han promulgado de manera reciente, y cuyos siete paquetes de legislación secundaria fueron aprobados durante la LXII Legislatura en Periodo Extraordinario:

  • Ley General del Sistema Nacional Anticorrupción

– Bases de coordinación, federales y locales
– Particularidades del Sistema Nacional de Fiscalización
– Particularidades de la Plataforma Digital Nacional

  • Ley General de Responsabilidades Administrativas

– Descripción de las responsabilidades administrativas
– Declara la obligación de los servidores públicos a presentar declaraciones patrimoniales, de intereses y fiscales

  • Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas de la Federación

– Soporte para fortalecer la Auditoría Superior de la Federación

  • Reformas a la Ley Orgánica del Tribunal Federal de Justicia Administrativa

– Creación del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, como órgano jurisdiccional y autónomo (cuya función es emitir fallos y actuar con jurisdicción)

    • Reformas a la Ley Orgánica de la Procuraduría General de la República

– Creación de la Fiscalía Especializada de Combate a la Corrupción, órgano autónomo especializado en investigación y seguimiento de actos de corrupción.

  • Reformas al Código Penal Federal

– Erige sanciones para quienes cometan actos de corrupción

  • Reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal

– Faculta a la Secretaría de la Función Pública en función de fortificarla para optimizar la prevención y el combate a la corrupción

El objetivo primordial para este sistema es que sea conducido en su totalidad por los ciudadanos y para beneficio de los ciudadanos; sin embargo, también se pretende crear a partir de él instituciones autónomas y fuertes para sancionar y prevenir la corrupción, eliminar trámites innecesarios, además de monitorear las actividades de los servidores públicos.

¿Qué es lo que va a cambiar?

  • El sistema poseerá la presencia indisoluble de un Comité de Participación Ciudadana -constituido por cinco personas-. Además, representantes de las organizaciones civiles que promovieron el desarrollo del SNA también son acreedores a ser miembros de este órgano.
  • Contará con un Comité Coordinador, que será conformado por: la Auditoría Superior de la Federación, la Secretaría de la Función Pública, el Consejo de la Judicatura Federal, el Tribunal de Justicia Administrativa, la nueva Fiscalía Especializada, el INAI (Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales) y el Comité de Participación Ciudadana con el objeto de proteger la transparencia, sobre todo para evitar o sancionar los actos impúdicos de los servidores públicos.
  • Será creada una infraestructura digital llamada “Plataforma Digital nacional”, que se implementará con el fin de dar seguimiento puntual, metódico e imparcial a las declaraciones de impuestos, intereses y patrimonio.
  • Se clasificarán a detalle aquellas conductas consideradas corrupción para esquematizar los grados de jurisdicción y las sanciones en particular.
  • Se designará a un Fiscal Anticorrupción, funcionario autónomo encargado de perseguir e investigar actos de corrupción.
  • La estructura del sistema será replicado a nivel de estado.

El SNA y los factores que involucra, propiciarán una evolución insondable en materia de control, sanción, prevención y combate a la corrupción.